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El caso del Padre Feeney
Los herejes y modernistas resisten a la verdad al igual que resisten a Aquél que es la Verdad (Juan 14, 6). Y porque resisten a la verdad, ellos también se resisten a los hechos, porque los hechos relatan la verdad sin mezcla de error. Uno de los hechos que los modernistas y herejes resisten más que a todos es el que la Iglesia católica ha enseñado infaliblemente, que fuera de la Iglesia católica no hay salvación y que Juan 3, 5 debe entenderse según está escrito y que el sacramento del bautismo es necesario para la salvación (Trento, sesión 7, can. 5 sobre los sacramentos).
Entonces, ¿qué hacen estas personas frente a estos hechos cuando se los mira fijamente a la cara? Ellos recurren a atacar a quien informa de estos hechos (argumentum ad hominem), lo que les permite ignorar los hechos mismos. El episodio del Padre Leonard Feeney, SJ, es un ejemplo de ello.
En realidad, el dogma fuera de la Iglesia no hay salvación no tiene nada que ver con el Padre Leonard Feeney. (De hecho, yo nunca había oído hablar del P. Feeney cuando llegué a la misma conclusión – basado en el dogma católico – de que el sacramento del bautismo es absolutamente necesario para la salvación y que todos los que mueren como no católicos se pierden). Ello tiene que ver con la enseñanza de la Cátedra de Pedro, como lo he demostrado, la cual es la auténtica e infalible enseñanza de Cristo. Rechazar este dogma católico es rechazar a Cristo mismo.
El Padre Feeney se hizo famoso por su posición pública a favor del dogma fuera de la Iglesia católica no hay salvación en las décadas de los años 1940 y 1950. La mayoría de las personas no se da cuenta que, ya en esa época, la mayoría de los obispos del mundo no eran tradicionalistas acérrimos. La mayoría de los obispos del mundo ya había abrazado la herejía del indiferentismo, lo que explica por qué la mayoría de ellos firmaron los documentos heréticos del Vaticano II poco tiempo después. Ellos habían abrazado la idea herética de que la “ignorancia invencible” salva a los que mueren como no católicos, como lo he discutido en algunas secciones anteriores. Por ello es fácil detectar la herejía contra el dogma en la mayoría de los manuales y textos de teología desde comienzos del siglo XIX. De hecho, en su época, el P. Feeney escribió a todos los obispos del mundo acerca del dogma fuera de la Iglesia no hay salvación y solo recibió tres respuestas positivas. En otras palabras, solo tres de los obispos del mundo en ese tiempo manifestaron una creencia positiva en el dogma fuera de la Iglesia católica no hay salvación tal como había sido definido. No es de extrañar que el Vaticano II haya sido aprobado prácticamente sin resistencia por el episcopado.
El P. Feeney creía y predicaba el dogma – tal como había sido definido – públicamente en Boston. Él creía y predicaba que si un hombre no abrazare la fe católica – sea judío, musulmán, protestante o agnóstico – él perecerá eternamente en el infierno. Muchos se convirtieron, y muchos se enojaron. Él tenía no pocos enemigos, en especial entre el creciente número de modernistas, políticamente correctos y entre el clero comprometido.
Uno de sus principales enemigos fue el arzobispo de Boston, Richard Cushing, un hombre del año B’nai Brith (masón judío), que decía que el dogma fuera de la Iglesia católica no hay salvación era una “tontería”. En abril de 1949, Cushing silenció al P. Feeney y puso en interdicto al St. Benedict Center, o sea Centro San Benito, el apostolado afiliado al P. Feeney. La razón dada por Cushing fue por “desobediencia”, pero la verdadera razón era la posición pública del P. Feeney a favor del dogma fuera de la Iglesia católica no hay salvación. Ello no se debió a la posición del P. Feeney en contra de la teoría del ‘bautismo de deseo’, ya que esta no fue publicada por primera vez hasta 1952. El descontento de Cushing con el P. Feeney se basó estrictamente en la posición del P. Feeney a favor del dogma definido de que solamente los católicos – y aquellos que se convierten en católicos – se pueden salvar.
El Antipapa Juan XXIII con el ‘cardenal’ Richard Cushing de Boston – un hombre que decía que el dogma fuera de la Iglesia no hay salvación era una “tontería”, y que una vez recibió el (titulo de) hombre del año B’nai B’rith (masón judío). También observe lo que es posiblemente un apretón de manos masónico.
Encabezado del periódico The Boston Daily Globe: "ARZOBISPO HACE CALLAR A SACERDOTE"
Cushing estaba aliado con otros clérigos herejes de Boston, el área donde estalló la controversia. El P. John Ryan SJ, director del Instituto de Educación de Adultos de la Universidad de Boston, declaró en otoño de 1947: “No estoy de acuerdo con la doctrina del P. Feeney sobre la salvación fuera de la Iglesia”[2]. El P. Stephen A. Mulcahy SJ, decano de la Facultad de Artes y Ciencias de la Universidad de Boston, la designó como: “La doctrina del P. Feeney de que no hay salvación fuera de la Iglesia”[3]. Y el P. J.J. McEleney SJ, provincial de la provincia de New England de la Compañía de Jesús, le dijo al P. Feeney en una reunión personal, que se le estaba ordenando transferirlo a la Universidad de Holy Cross debido a “su doctrina”[4]. El P. Feeney respondió rápidamente: “¿Mi doctrina sobre qué?” A lo que el P. McEleney respondió: “Lo lamento, no podemos hablar de eso”.
Desde el principio, estos clérigos caídos se unían más bien en torno al tema del P. Feeney que por la verdadera razón que estaba por detrás. Esto les permitió centrarse en el P. Feeney e ignorar a Jesucristo, de cuya doctrina se trataba.
Estos herejes no se daban cuenta que al despreciar un dogma definido como siendo algo de invención del P. Feeney es blasfemo y severamente deshonesto. Pero Dios no puede ser burlado. Vemos que lo mismo sucede hoy día, de manera especialmente rampante entre los llamados tradicionalistas. Pero volveré a este punto.
El 2 de diciembre de 1948, el presidente del Colegio de Boston, el P. William L. Keleher SJ, tuvo una entrevista con el Dr. Maluf, quien era un aliado del P. Feeney en su posición a favor del dogma. El P. Keleher declaró:
Cuando Maluf (un miembro de la facultad del Colegio de Boston) respondió que esta “frase” es un dogma definido, el P. Keleher dijo:
Pues este es, en breves palabras, el caso del Padre Feeney. El Padre Feeney sostenía, como había sido definido, que no hay salvación para los que mueren como no católicos. Sus adversarios, incluyendo el P. Keleher (presidente del Colegio de Boston), el arzobispo de Boston, los sacerdotes del Colegio de Boston, y los “teólogos” del Seminario de San Juan, sostenían una doctrina diferente “sobre la salvación de los no católicos”. Esta fue la batalla. Esa fue la línea divisoria. Se estaba de un lado o del otro. Se creía que no había salvación para los que mueren como no católicos o se creía que sí había salvación para los que mueren como no católicos. Permítaseme recordar brevemente al lector de qué lado se encuentra la Iglesia católica.
Un “sacerdote jesuita” de la nueva religión del Vaticano II describe magistralmente cómo fue la escena cuando “el caso de la herejía de Boston” (es decir, si solo los que mueren como católicos pueden salvarse) estalló a la vista del público durante la Semana Santa de 1949.
Jueves, 14 de abril de 1949: CUATRO PROFESORES DEL COLEGIO DE BOSTON SON EXPULSADOS TRAS INVESTIGACIÓN ------ El presidente del colegio los despidió, ellos reclaman, cuando se negaron a retractarse de las declaraciones hechas contra el General de la orden jesuita -- Acusan al Padre Keleher de "herejía" -- Uno de los [cuatro] hombres es profesor de la preparatoria del colegio de Boston
El 13 de abril de 1949, el P. Keleher (presidente del Colegio de Boston) despidió al Dr. Maluf, a James R. Walsh y a Charles Ewaskio de la facultad del Colegio de Boston por acusar al colegio de herejía contra el dogma fuera de la Iglesia no hay salvación. En su declaración a la prensa, del 14 de abril, donde explicó la razón de sus despedidos, el P. Keleher dijo:
No se puede dejar de notar el doble lenguaje del P. Keleher: estos hombres fueron despedidos por ideas conducentes a la intolerancia, que no podían ser toleradas. Si aquí la falsa doctrina es la intolerancia, como indica el P. Keleher, entonces él se estaría condenando por su propia boca. Por otra parte, no se puede pasar por alto la aseveración desvergonzada del P. Keleher de que “su doctrina (es decir, el dogma solemnemente definido de que los que mueren no católicos no se pueden salvar) es errónea”. Por esta declaración, Keleher está afirmando que la doctrina de la Iglesia (de que no hay salvación fuera de la Iglesia) es errónea y de ninguna manera es suya. Este fue el tipo de carácter herético, anticatólico que estaba confabulado con el arzobispo Richard Cushing en el esfuerzo de aplastar la predicación del dogma por el P. Feeney.
El P. Feeney a las puertas de St. Benedict Center (Centro San Benito)
Este fue el principio del fin, por así decirlo, como se verá cuando analicemos las consecuencias en Boston por causa de su traición al dogma fuera de la Iglesia no hay salvación.
[1] The Papal Encyclicals, vol. 2 (1878‐1903), p. 394.
[2] Hno. Robert Mary, Father Feeney and The Truth About Salvation, p. 13.
[3] Hno. Robert Mary, Father Feeney and The Truth About Salvation, p. 13.
[4] Hno. Robert Mary, Father Feeney and The Truth About Salvation, p. 14.
[5] The Papal Encyclicals, vol. 1 (1740‐1878), p. 297 y nota 4.
[6] Hno. Robert Mary, Father Feeney and The Truth About Salvation, p. 16.
[7] Hno. Robert Mary, Father Feeney and The Truth About Salvation, p. 16.
[8] The Papal Encyclicals, vol. 1 (1740‐1878), p. 229.
[9] “P.” Mark Massa, Catholics and American Culture, New York: The Crossroad Publishing, Co., 1999, p. 31.
[10] Hno. Robert Mary, Father Feeney and The Truth About Salvation, p. 18.
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Impactante, no miro discrepancias
Martin 2 semanasLeer más...Tiene razón. Gracias por compartir. Y de mi parte lo compartiré para que muchos lo vean.
Verónica Raygoza 2 semanasLeer más...Masturbarse es opuesto e incompatible al verdadero amor a Dios. La opción superadora ante la tentación del placer auto infligido es la oración
Gustavo Suárez 4 semanasLeer más...Más claro imposible. Gracias hermanos
Laudem Gloriæ 4 semanasLeer más...Esta listo. Gracias.
Monasterio de la Sagrada Familia 4 semanasLeer más...Hola. Ya fue publicado. Gracias.
Monasterio de la Sagrada Familia 4 semanasLeer más...Cuándo van a publicar el calendario de 2025?
Reynaldo 4 semanasLeer más...Dios los bendiga, porfavor suban pronto el calendario 2025 para poder imprimirlo.
nicolas guiñez 2 mesesLeer más...Lugares no sólo solitarios, sino, además, silenciosos. De nada sirve estar solo si uno, en el afán de escapar su propia consciencia y la voz de Dios o de sus...
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